Desde hace más de 50 años los invernaderos del sureste español han asumido su papel como los grandes suministradores de Europa.
Gracias a las 150.000 personas que cada día abandonan la seguridad de su hogar y se dirigen a sus centros de trabajo en invernaderos, almacenes de manipulado, suministros, industria auxiliar, o se meten en la cabina de un camión y se alejan de su tierra para llevar alimentos saludables y esperanza a otros europeos. Su tarea es encomiable.
#ElCampoNoPuedeParar